Agosto continúa con la racha de altas temperaturas extremas registradas en julio, situación agravada por los incendios forestales y la mala calidad del aire, que afectan a millones de personas, alertó hoy la OMM.
La Organización Meteorológica Mundial (OMM) hace hincapié en la importancia de las alertas tempranas y los planes de acción para la salud relacionados con el calor.
“A veces se dice que el calor extremo es el asesino silencioso, pero con la ciencia, los datos y las tecnologías actuales, el silencio ya no es una excusa. Todas las muertes por calor extremo se pueden prevenir”, declaró la vicesecretaria general de la OMM, Ko Barrett.
Las estimaciones basadas en modelos muestran que, de 2000 a 2019, se produjeron aproximadamente 489 mil muertes relacionadas con el calor cada año, el 45 por ciento de ellas en Asia y el 36 por ciento en Europa.
El pasado mes fue el tercer julio más cálido a nivel mundial (después de julio de 2023 y 2024), según el Servicio de Cambio Climático Copernicus de la Unión Europea. La temperatura media de la superficie del mar también fue la tercera más alta registrada, en tanto la extensión del hielo marino ártico se ubicó en el segundo lugar más bajo para julio en los 47 años de registros satelitales, prácticamente empatada con los de 2012 y 2021.
Las olas de calor afectaron especialmente a Suecia y Finlandia, que experimentaron un período inusualmente largo con temperaturas superiores a los 30 °C.
El sureste de Europa también sufrió olas de calor e incendios forestales, con una temperatura récord nacional de 50,5 °C en Turquía.
Fuera de región europea las temperaturas fueron más altas que la media en el Himalaya, China y Japón.
En tanto, el calor extremo ha alimentado incendios forestales devastadores, causado víctimas y empeorado la calidad del aire.
Tomado de PL